Para nadie es un secreto la difícil situación sanitaria que afronta el mundo en estos momentos, el COVID-19 ha hecho que muchas instituciones deban cambiar sus normas operativas y, los gimnasios no escapan de esta realidad.
Muchos Box de CrossFit han debido cerrar sus puertas por largos periodos de tiempo, ya que no cuentan con los espacios adecuados para la realización de estas actividades, sin poner en riesgo la salud de los usuarios.
No hay apoyo entre dueños de instalaciones
El Crossfit es una disciplina deportiva que puede ser practicada en espacios abiertos, con la distancia recomendada por los expertos en salud, entonces ¿Por qué no practicarlo al aire libre? La respuesta es sencilla, los ayuntamientos no han facilitado estos espacios.
La comunidad de Boxes realiza trámites
Los sitios especializados en esta práctica han buscado maneras de reinventarse, tal es el caso de CrossFit Coraje, quienes concluyeron el año 2020 con más de 400 abonados, a los que enviaron videos personalizados e incluso jugaron al amigo invisible. Estas acciones han reforzado la relación que tienen con los diversos clientes y se ha convertido en un garante de la permanencia de los centros de CrossFit en España.
Covid-19 ha afectado la economía
La grave situación originada por la pandemia en el año 2020, hizo que CrossFit Coraje percibiera menos ingresos que en el año 2019, unos 140.000 euros menos para ser exactos, sin contar el dinero que tenían previsto para la inauguración de un box nuevo, que debió ser invertido en otro tipo de gastos.
No obstante, pese a estos inconvenientes, continúan trabajando para llevar al público un servicio de primera calidad, expandiendo las opciones que presentan a estos y contratando a profesionales en diversas áreas.